¿Quién sigue?La amistad si muere pero no la inhumas.
No me preparé para ver muerta a ninguna amiga. Di por hecho que la amistad no le teme a la vida.
Amigas de una época, de ayer o de hoy que importa, el afecto se hace nudo en el corazón, en el estómago en la razón y en el recuerdo.
La esperanza cobija y disculpa mi retraso, no el mental, las distracciones son selectivas, detengo mi tiempo, creyendo que manipulo mis apegos.
Y, como por todo se hace tarde, nunca llego a tiempo a los funerales. Soy un asco por cobarde.
Reconozco pero nunca lo acepto; mi coraza es el desapego, por eso, siempre digo:
¡Adios!
Pero nada me convence, las despedidas nunca se anuncian, y no creo en ellas.
Evado los tiempos, como si así pudiera engañar a la muerte.
Y no se por qué extraño motivo recurro a la Zarzamora.
"No se que tiene la Zarzamora que siempre llora que llora por los rincones, ella que presumía de llegar a muchos corazones"
Balaustre:
Me dice una conocida:
“Todos evitamos el olor a muerte“.
Busco aceptarlo no que me disculpen