Mi secuaz
Adoptar pareja para inventarla y enamorarme a diario, aunque sea preciso morir olvidando cada instante para que la ocurrencia perdure hasta la vejez en un pacto de complicidad con imaginación, una sociedad de inversión compartida a largo y corto plazo.
Eligiendo el capital emocional con inteligencia y responsabilidad, invertir juventud, gracia, carácter y los buenos momentos para tolerar los malos, y en la gentileza prepararse para los achaques con desmemoria, inventar y renovar el refugio en la secreta ilusión del amigo leal.
La amistad entre mujeres es una sociedad de inversión con riesgo continuo y sin garantía, lealtad que se ausenta en las amigas sin concepto, sin teoría, sin palabra, reunidas en la coincidencia del no hay más y el puñal inevitable del susurro que alcanza mi espalda y el oído que siempre alerta y nunca ignora.
No todas las personas poseen el mismo tiempo, y la libertad de priorizar la dedicación en las atenciones para cautivar la vida. Una de dos: Decido o me conformo.
Balaustre:
Vuelves muy preciado a aquello a lo que le dedicas tu tiempo y cuidado.
