Seguidores

EDITORIALES


Anudar el hallazgo


La historia del día en la palabra de hoy:


La palabra de ayer, la perdida, la del miedo, la excusa
La del mañana, con incógnita, magia e incertidumbre
Y una sola palabra con intensidad, anudar y vivir el hoy.


Siempre ahora.








(Iniciamos 366 historias)
08 de enero 2015

sábado, 21 de agosto de 2010

Historia de sàbado: Malinche

La Malinche o Doña Marina, Malinalli Tenépatl, Coatzacoalcos (c.1502 - c.1529) en la clase alta de la sociedad mexica. Indígena mesoamericana, intérprete y compañera de Hernán Cortés, cuya labor fue fundamental en el proceso de conquista de México.



Hija de un feudatario del Imperio azteca y su lengua era la náhuatl, los padres de Malintzin eran caciques de un pueblo llamado Painala. El historiador Gómez de Orozco supone que el nombre de su padre era el que señala como Malintzin Tenepal. Noble señor que se casó según la costumbre, con una señora de vasallos y Estados, de noble origen, llamada Cimatl, cacique de Xaltipa, joven y hermosa.


Malinche fue vendida por sus padres a un cacique de Tabasco, donde aprendió la lengua maya propia del territorio. Cuando el conquistador Hernán Cortés llegó a la zona, el 12 de marzo de 1519, recibió como presente veinte jóvenes esclavas, entre las cuales se encontraba quien, pese a que fue bautizada como Marina, pasaría a ser más conocida como Malinche.


Las jóvenes fueron repartidas entre los hombres de Cortés, resultando Malinche asignada a Alonso Hernández Portocarrero, quien hubo de marchar a España comisionado, en julio de 1519. Desde entonces, Malinche se convirtió en la amante de Cortés así como en su intérprete. En un principio contó con la colaboración en la traducción de Jerónimo de Aguilar, pero pronto habló la lengua de los españoles.


En 1523, Malinche tuvo un hijo de Cortés, Martín, el primogénito aunque ilegítimo del conquistador. Participó en la expedición que, en busca del rebelde Cristóbal de Olid hacia la región de las Hibueras (Honduras), emprendió Cortés en 1524. Por entonces, fue repudiada por Cortés y se casó con uno de sus hombres de confianza, Juan Jaramillo, de quien dio a luz una hija, llamada María, poco antes de fallecer.


Es indudable, más allá de su servicio como intérprete, Malintzin asesoró a los españoles sobre las costumbres sociales y militares de los nativos, posiblemente realizó tareas que hoy llamaríamos de inteligencia y diplomacia, jugando un papel importante durante la primera parte de la conquista. Tuvo un hijo de Cortés, Martín, primogénito pero ilegítimo; luego daría Cortés el mismo nombre de Martín a su primer hijo legítimo, que tuvo con Juana de Zúñiga.


Cortés posteriormente en Orizaba casó a Malintzin con un hidalgo, Juan Jaramillo, de quien se sabe que ella tuvo otra hija, María Jaramillo. Hay constancia de que Malintzin había muerto en 1529, por documentos de las gestiones de su viudo para volverse a casar. Al parecer Malintzin falleció enferma de viruela por una epidemia que hubo en 1528 o 1529. Marina tuvo un papel relevante en la conquista de México. Bernal Díaz del Castillo, en su Historia verdadera, encomia repetidamente su compromiso con los conquistadores y su valor en la batalla. Recuerda también la alegría de los españoles cuando supieron que Marina había sobrevivido a la Noche Triste.