24horas de Enrique Peña Nieto en los medio

SDPnoticias.com

YOLANDA VALENZUELA

@yovaro
2011-09-21

Enrique Peña Nieto en menos de  24 horas de aceptar públicamente el interés por contender a la Presidencia de la República en el 2012, me tiene irritada su presencia continua, no sé si en todos los medios de comunicación pero si en los que yo me informo y celebro sobremanera que de  los principales partidos políticos sea el aspirantes  que menos  presencia tiene en twitter, hasta ahora.

Sin ser una garantía, le reconozco a Enrique Peña su madurez joven a veces necesaria para innovar con valentía  y construir una agenda de trabajo inteligente, eficaz y eficiente en todos los temas con objetivos contundentes sin margen de error, pero me preocupa su confianza la cual espero sea solo una mala apreciación de mi parte,  el escenario  lo veo demasiado parecido a los tiempos de algarabía  cuando, no solo se sospechaba y esperaba el destape oficial del candidato del Partido Revolucionario Institucional, se daba por hecho, Luis Donaldo Colosio en la Presidencia de la República.

En el escenario político están  los principales personajes de aquellos tiempos, no son todos los que están, ni están todos lo que son, que parecía que le facilitaban y preparaban el camino  a la presidencia a Luis Donaldo: Carlos Salinas de Gortari, el senador Manlio Fabio Beltrones, Senadora María de los Ángeles Moreno, Emilio Gamboa Patrón y Manuel Camacho Solís entre otros  que a falta de cargo público y/o político no figuran en los medios y el principal no falta, es como  las tuzas opera desde la cueva, dicen.

Nadie nace con tanta suerte en la vida y con los sueños hechos realidad con seis años de anticipación, no importa si Enrique Peña Nieto  es popular ò todo un fenómeno de imagen política pública y producto de marketing perfecto, sin embargo los ciclos de productos son: Lanzamiento, crecimiento, madures y declive, además espero que no  olvide  la suerte de Luis Donaldo Colosio y Diego Fernández de Cevallos entre otros, en lo más seguro siempre hay riesgo; después de alabarlo soberbiamente y decretar que ¡Dios no podría hundirlo!  Hasta el Titanic naufragó.  

P.D.  Todas las cosas ya fueron dichas, pero como nadie escucha es preciso comenzar de nuevo. Andre Gide